El juego de pelota se convirtió en la forma para resolver conflictos entre tribus del mexico prehispánico. Los vestigios de estas canchas están en zonas arqueológicas de la zona centro y sur del país
1 Juegos de pelota Monte Albán
El sitio arqueológico se localiza a 10 kilómetros de la Ciudad de Oaxaca. El “juego de pelota grande” de este asentamiento se ubica al norte de la plataforma oriente, pero existen aquí otros cuatro. La ciudad fue fundada por zapotecas.
2 Juegos de pelota Zona Arqueológica Dainzú
Los juegos de pelota fueron muy importantes para los zapotecas que habitaron en este sitio arqueológico al que los especialistas prefieren nombrar como Macuilxóchitl, que significa “cinco flor”, una deidad de la práctica del juego de pelota. Los relieves de los conjuntos arquitectónicos representan en su mayoría a jugadores de pelota parecidos a los del edificio de los Danzantes en Monte Albán.
3 Juego de pelota Zona Arqueológica Edzná
Edzná fue una ciudad maya asentada en Campeche por unos habitantes a los que se les conocía como “itzáes”. Su juego de pelota es uno de los mejor conservados del país; está compuesto por dos estructuras que en la cúspide tienen espacios en donde colocaban a las deidades a las que se les dedicaba la disputa deportiva.
4 Juego de pelota Zona Arqueológica Xochicalco
Al suroeste de la Ciudad de Cuernavaca, Morelos, se encuentra esta ciudad ocupada por teotihuacanos y otros grupos de la región Mesoamericana. Cuenta con tres juegos de pelota el primero de ellos se encuentra al norte, el segundo al sur y el tercero al este de la ciudad.
5 Juego de pelota Zona Arqueológica Guachimontones
Guachimontones es una zona arqueológica ubicada en el municipio jalisciense de Teuchitlán que se distingue por basamentos cónicos, patios circulares y un juego de pelota de 111 metros, quizá la primera cancha de dimensiones gigantescas, claro después siguió la de Chichén Itzá de 135 metros pero fue construida mil años después de la de Guachimontones.
6 Juego de Pelota Zona Arqueológica Chichén Itzá
Esta zona arqueológica se ubica a 115 kilómetros de la ciudad de Mérida, Yucatán. Fue ocupada por mayas y se le considera un ejemplo de los movimientos migratorios que se dieron en Mesoamérica hacia el Posclásico Temprano. Su medida es de 135 por 20 metros con dos altos muros con un anillo de piedra empotrado en cada uno que tienen serpientes emplumadas grabadas. Las ilustraciones hechas en relieve muestras a 40 personas participando en estos encuentros.
7 Juego de Pelota Zona Arqueológica Uxmal
Se le considera a esta zona arqueológica de Yucatán la obra arquitectónica más importante de la región Puuc. De hecho la cancha de juego de pelota es la única construida en zona Pucc. Es una de las estructuras más deterioradas.
8 Juego de Pelota del emperador Moctezuma
En días recientes el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) descubrió un juego de pelota cerca del Templo Mayor, del Centro Histórico de la Ciudad de México. Se dice que en este juego de pelota pudo haber tenido alguna participación el emperador azteca Moctezuma.
9 Juegos de pelota Zona arqueológica de cantona
Este asentamiento prehispánico en el estado de Puebla cuenta con 27 juegos de pelota, es así el sitio arqueológico con el mayor número de vestigios de este tipo. Los expertos opinan que pudieron haber sido más canchas las que se construyeron aquí, pero tal vez muchas fueron destruidas. Es la cultura Olmeca-Xicalanca la que realizó toda esta infraestructura entre los años 450-400 a.C.
10 Tajín es una de las ciudades con mayor cantidad de canchas para el juego de pelota, 17 en total, un ritual de suma importancia en la época prehispánica. Tal proliferación ha sido interpretada como un reflejo de que la ciudad, de acuerdo con la situación prevaleciente en la época, era habitada por grupos con cierta autonomía y tal vez hasta de origen diverso. El ritual del juego de pelota se encontraba relacionado metafóricamente con aspectos como el transcurso de los astros en el firmamento y la creación del mundo, y era una ceremonia íntimamente ligada a los gobernantes y la legitimación de su autoridad.
11 En el área de las ruinas de Tula se distinguen varias canchas o pistas para el juego de pelota. Una descubierta completamente en 1941 tiene la clásica disposición de un espacio en forma de T doble, con parapetos laterales para presenciar el juego desde lo alto (Figura 92). Carecemos todavía de completa información acerca de la manera que tenían los mexicanos y mayas de jugar sus partidos, y se está en la duda todavía si el juego de pelota era de origen maya o mexicano. No se descubren canchas en las más antiguas ciudades mayas, y, en cambio, ha sido una revelación encontrar que los bienaventurados juegan a la pelota en el fresco del Paraíso de Tlaloc, en Teotihuacán. La palabra azteca tlaxtli para designar el juego de pelota, deriva probablemente de la tolteca teutlachtli, campo de los dioses.
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